jueves, 5 de julio de 2012

¿Y qué haces si dudas de ti?,

Pregunta: ¿Y qué haces si dudas de ti?,
                es decir, si quieres creer en ti y tratas de pensar 
                en tus éxitos pero no consigues sentir esa actitud de éxito.

Respuesta:  Adivina qué!?, creételo!!! 
y vuelve a pensar en los momentos en los que tuviste éxito…
 Solamente pensar en ello ya te llevará al estado emocional 
en el que lo viviste. 
Si tú no eres capaz de dominar tus pensamientos, ¿quién lo hará?.
 Hazlo. Ya verás como empiezas a tener otra actitud.
 Si eres capaz de imaginarte un elefante azul en tu salón
 viendo la televisión AHORA MISMO,
 tienes dominio sobre tus pensamientos, 
así que imagina que tienes éxito o recuerda tus éxitos pasados.
 Deberás excitarte con tus recuerdossentirlos y creértelos vigorosamente para cambiar la actitud
Sin emoción no hay acción, es decir, si tú no me emocionas, 
no te voy a comprar. No te voy a comprar nada de lo que me vendas,
 ya sea amor, trabajo, salud… si no me conmueves, no me mueves.
 Y si tú no te sabes conmover a ti mismo, dificilmente puedas conmover a otros.

miércoles, 30 de mayo de 2012

Póngase la máscara usted primero


“El autosacrificio es para débiles que, temerosos de vivir sus propias vidas, le endosan esa responsabilidad a otros en nombre de la bondad… y encima después esperan gratitud a cambio.
Es convirtiéndose en todo lo que uno puede llegar a ser, que ayudará a otros, mediante su ejemplo. No hay satisfacción o felicidad en ayudar a otros antes de haber aprendido a ayudarse a uno mismo.”
(Sheelagh Mawe, “Dandelion”)
A lo largo de mi carrera nos hemos topado con mucha gente que tiene una creencia que le traba su camino al éxito . A veces dicha creencia es consciente, declarada a viva voz y hasta enarbolada como bandera militante. Otras veces es subconsciente, una traba mental moldeada o insertada por nuestros padres, educadores o nuestro medio ambiente. Se trata de la idea de que “no es ético ganar (mucho) dinero mientras haya otras personas que ganen menos que nosotros”.
A veces adopta una forma pasiva, negativa, cuando la persona se regodea en su propia miseria, y construye su identidad en base al sufrimiento que le causan factores externos como el gobierno, el país, la mala suerte y el destino cruel.  Su forma de relacionarse con los demás consiste en ponerse en el papel de víctima que despierta compasión o solidaridad.
Otra forma más activa, es la persona que se desvive ayudando a los demás, regalando su tiempo, su dinero, sus recursos, sin preguntarse  si lo que hace sirve de algo y a veces hasta sin preguntarse si su ayuda es necesaria o tan siquiera bienvenida. Su identidad se basa en que es una buena persona que se desvive por los demás, por lo que demanda simpatía, respeto, admiración y gratitud. No tiene tiempo para ocuparse de sí misma, porque siempre hay algún otro para ayudar primero.
Todos los que tenemos creencias cristianas tendemos a trabarnos en estos puntos.  Jim Rohn ,hablando  sobre dicho tema, sabiendo que él también compartía  educación y valores cristianos.
Ya no recuerdo sus palabras exactas. Lo que sí recuerdo es que usó como ejemplo las instrucciones de seguridad que la azafata nos había transmitido minutos antes. “En caso de descompresión de la cabina, máscaras de oxígeno se desprenderán del techo frente a usted… SI VIAJA CON NIÑOS O PERSONAS A SU CUIDADO, PONGASE LA MASCARA USTED PRIMERO, LUEGO OCÚPESE DE PONERLE LA MÁSCARA A LA PERSONA A SU CUIDADO.”  Estas instrucciones son contrarias a nuestros instintos. Cualquier madre intentaría poner la máscara  su hijo primero, y recién después la suya propia. Sin embargo, al proceder así pone en riesgo la vida de ambos (porque puede desmayarse antes de lograr colocar la máscara al infante).
Lo mismo pasa con el tema de ayudar, decía Jim. La única forma de ayudar a los demás es ayudarse primero a uno mismo. Claro que algunos se olvidan de la segunda fase del plan, y se quedan  sólo en la autoayuda.
Otras personas de gran éxito se dedicaron a amasar fortunas primero para luego utilizarlas para bien de la humanidad, como Andrew Carnegie, Bill Gates o Warren Buffet. Claro, ellos tenían un talento que lograron convertir en riqueza, y su única forma de ayudar a los demás es repartiendo dicha riqueza con fines benéficos. Su talento es único, por lo que no se puede repartir ni duplicar.
Nosotros, los networkers tenemos la ventaja de contar con un sistema de producto y negocio que permite que las personas se ayuden a sí mismas, y nuestra mejor forma de ayudar a las personas es ayudándoles a que se ayuden a sí mismas. Podemos compartirlo y duplicarlo. Podemos enseñar a pescar en vez de regalar pescado. Y encimas nos pagan por hacerlo.

lunes, 12 de marzo de 2012

Que debo hacer? es mi rumbo el correcto.


Cuando se toma la decisión de iniciar un emprendimiento personal surgen preguntas acerca de cómo debe hacerse y si el rumbo elegido es el correcto.
Pero…  ¿tú sabes bien qué debes preguntarte?
Cuestionarnos es un medio seguro para asegurarnos que las decisiones tomadas son las correctas. Poner en duda nuestras propias creencias y decisiones nos permite cambiar nuestras estrategias y corregir la trayectoria de nuestro negocio. Aunque no lo creas (sigue…) estas pequeñas correcciones podrían en unos años cambiar radicalmente el destino del emprendimiento que se está intentando desarrollar.
El objetivo es centrarse en las preguntas claves para hacer un ejercicio rápido. Quizás, si ya te has adentrado en el mundo del desarrollo personal, nada de esto te resulte nuevo, pero si quieres progresar, toma nota de estas preguntas que podrían pasar a ser un muy buen hábito. Guarda esta página en tus favoritos como ayuda memoria y una vez por semana, en algún momento tranquilo hazte estas preguntas y de ser posible anota las respuestas. Te recomiendo utilices un cuaderno o anotador para tal fin.
  • ¿Qué aprendí esta semana?
Por simple que parezca la pregunta, aprender algo cada semana nos permite mejorar y abrir nuestro horizonte. Aquella semana en la que nada aprendiste te sentirás vacío. Si no eres capaz de responder esta pregunta debes actuar de inmediato y hacer algo nuevo. Si has aprendido mucho, limítate a anotar las 2 ó 3 cosas más importantes.
  • ¿Cuál fue el mayor éxito de la semana?
Debes sentirte orgulloso de tus éxitos, aun de los más modestos. Si has gestionado mejor tu tiempo o has comenzado a escribir ese e-book tan postergado, todo sirve. Busca bien, siempre encontrarás algo.
  • ¿Cuál fue la decepción de la semana?
Quizás te has olvidado de algo o borraste ese archivo importante o no recibiste la llamada esperada. No es grave tener conciencia de los errores o fracasos. Somos humanos después de todo y esa conciencia es la que nos permite avanzar. Tienes que tomar la responsabilidad de tus pequeños fracasos y evitar que se instalen o que te avergüencen. No te culpes y encuentra la manera de hacer las cosas de otro modo.
  • ¿De qué tuve miedo esta semana?
Aquí debes ver todo aquello que has evitado hacer por temor. Una conversación, una reunión, etc. Cuál es ese problema que debes enfrentar pero no quieres. Hacer frente a estos temores es una excelente forma de avanzar. Quizás puedas mentirle a todos pero es imposible que te mientas a ti mismo.
  • ¿Qué puedo hacer con este tema?
Cuando estás trabado con algún tema, ya sea personal o laboral, debes actuar ¿Qué hacer? Busca información, reúnete con un especialista, conversa con un amigo. Poco importa qué decidas, lo importante es tener diciplina  y hacer siempre algo!
  • ¿Cuáles son las 3 cosas más importantes que debo hacer la semana próxima?
Idealmente deberías dejar de lado los objetivos a largo plazo y elegir una meta simple y alcanzable. Te daré un ejemplo sencillo: si no sabes cocinar seguramente te será difícil hacer una buena tarta de chocolate pero si tienes una buena receta y comienzas practicando cada paso, seguramente luego de un determinado tiempo lograrás obtener una tarta deliciosa. Escribe tu propia receta para ir resolviendo tus problemas paso a paso.
  • ¿Cuál será mi recompensa cuando logre el objetivo?
Visualizar una recompensa es una forma de motivarse cuando el camino se hace cuesta arriba. Haz de tu vida algo agradable de vivir. Encontrar un beneficio o incentivo para actuar es un excelente medio de empujarse a la acción y borrar malos hábitos.
  • ¿Mis acciones se corresponden con mis objetivos?
¿Estás alineado con tus objetivos? ¿Respetas tus valores en cada acción elegida? Evita las contradicciones y recuerda que todo lo que no vaya en el mismo sentido de tus objetivos va en contra de los mismos. Tan simple como eso.
  • ¿A quién tengo algo que agradecer?
Siempre puedes beneficiarte de una mano amiga, de una recomendación o consejo aunque el trajín diario hace que rápidamente se te olvide dar las gracias. Ser agradecido es importante. Esta actitud te permitirá encontrar más posibilidades de las que imaginas. Agradece gozar de buena salud, estar acompañado, trabajar de lo que te gusta.
Quizás se te ocurran otras preguntas. Si quieres puedes compártirlas conmigo. Los comentarios nos enriquecen a todos los emprendedores online sino también como personas. Puedes contar conmigo siempre!