lunes, 23 de agosto de 2010

Deje su luz brillar

DEJE SU LUZ BRILLAR

¿Usted ha encendido alguna vez la luz en un cuarto oscuro? La Diferencia es grande. Así y todo nada ha cambiado. Lo único, es que carecía de una cosa, la luz. Un poco de luz y la diferencia es grande.

No importa donde usted está o qué usted está haciendo, el mismo minuto en que usted enciende , ilumina, su conciencia usted enciende, ilumina, el lugar alrededor de usted.

La mejor manera de encender, iluminar, su lugar en la vida es encender la luz del optimismo. El optimismo viene de la palabra latina “optimus,” que significa “lo más mejor posible.” Es buscar lo mejor de todo en todo y de todos en todos.

El optimista tiene razón. El pesimista tiene razón. Uno ve cosas en la luz. El otro ve cosas en la obscuridad. Cada uno está en lo correcto. Ven solamente las cosas desde distintos puntos de vista. El optimista ve las cosas como son, y puede establecer las relaciones apropiadas. El pesimista ve solamente una parte pequeña de las cosas, y no puede establecer su relación verdadera. El optimista tiene el conocimiento iluminado por los hechos. El pesimista tiene conocimiento pero es amortiguado por la ignorancia. El optimista ve la dona, el pesimista ve el agujero. (donnuts, son como rosquillas dulces, en forma de anillo)

Optimismo es pensar en recto, derecho. Es una vacuna excelente para prevenir la falla, el fracaso. Manteniendo un sentido del equilibrio sin importar qué sucede. Poniendo en la práctica el adagio enseñado por Marcus Aurelius: “Lo que le suceda a todos, sucede porque debe, mientras que debe suceder.“ Whatever happens at all happens as it should happen.”

Un hombre sin un penique cayó en un restaurante. Él pidió ostras, una docena. Él era un optimista. Él esperaba encontrar una perla con la cual pagar las ostras. En la última ostra él encontró una perla valuada en mil dólares. ¿Paga el optimismo?

Cuando usted camina hacia la luz, las sombras quedan detrás de usted. Cuando usted camina lejos de la luz, las sombras están frente de usted. Practique y demuestre el optimismo en sus asuntos. Camine siempre hacia la luz y esfuércese de animar a otros que caminen con usted. Deje a su luz brillar. Ajuste el filtro con amabilidad, y aliméntelo con el aceite del optimismo.

El optimismo es como cavar un agujero en la tierra, cuanto más usted cava de ella, más grande se hace. Usted puede compartirlo con otros, porque es inagotable. Es también como un perfume, usted no puede esparcirlo alrededor sin conseguir que algo de él se quede, se pegue a usted. Comparte Optimismo con otros. Sea tan feliz con el éxito de ellos como con el propio. Nunca golpees al hombre caído, o ayude al chisme de la ciudad; y si usted oye hablar de uno al que le ha ido mal, haga lo mejor para pensar como hacerlo fuerte otra vez. Recuerde siempre deje su luz brillar.

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